top of page
favicon-256x256__3_-removebg-preview.png
favicon-256x256__3_-removebg-preview.png
Bebés por siempre
image (1).png

Lactancia

WWWD.png

 

La lactancia es el período de la vida durante el cual los bebés se alimentan básicamente de leche materna que maman de su madre, esta leche se constituye en el alimento esencial para ellos, si esta leche se administra como único alimento y a libre demanda durante los primeros 6 meses de vida, sus características nutricionales únicas les permitirán crecer sanos, ya luego de esta edad, la lactancia exclusiva debe complementada con alimentos sólidos.

La lactancia materna, además de ser la mejor fuente nutritiva del infante en los primeros meses de vida, tiene el inmenso poder de prevenir la mortalidad infantil relacionada con enfermedades diarreicas, esto gracias a su elevado contenido de elementos defensivos bioactivos, los cuales protegen el sistema digestivo de la invasión de agentes patógenos, además esta leche mucho más allá de ser un alimento, es un fluído vivo que va cambiando y es capaz de adaptarse a los diferentes requerimientos del bebé a lo largo del tiempo (módica su composición y volumen).

TIPOS DE LECHE.png

 

TIPOS DE LECHE

La glándula mamaria produce diferentes tipos de leche durante la lactancia y estos son:

Pre-calostro: Acumulado en los alvéolos durante el último trimestre de la gestación. Composición: exudado plasmático, células, inmunoglobulinas, lactoferrina, seroalbúmina, cloro, sodio y lactosa.

Calostro: Se produce durante los 4 días siguientes al parto, es de escaso volumen y alta densidad (2-20 ml/toma), en relación con la leche madura, esta tiene menos contenido energético, lactosa, lípidos, glucosa, urea, vitaminas hidrosolubles y nucleótidos, pero tiene más proteínas, ácido siálico, vitaminas liposolubles E, A, K y carotenos; también es superior el contenido de minerales, sodio, cinc, hierro, azufre, potasio, selenio y manganeso. La proporción de proteínas séricas/caseína es de 80/20.

 

Leche de Transición: Se produce entre 4-15 días luego del parto, hacia el quinto día hay un aumento brusco de su producción y va incrementando su volumen hasta llegar a 700 ml/día aproximadamente entre los 15-30 días posparto, su composición varía hasta llegar a la de la leche madura.

Leche Madura: El volumen aproximado es de 700- 900 ml/día durante los 6 primeros meses posparto, las grasas, proteínas y carbohidratos, unidos a las enzimas que contiene facilitan su digestión y absorción, lo cual hace seguro el aprovechamiento de todos los nutrientes y permite la formación de un sistema inmunitario fuerte, entre los 3 y 4 meses de nacido, el bebé requiere 1,1g de proteína kg/día y la leche madura es suficiente para cubrir estos requerimientos. 

 

Leche Pre término: Está presente en mujeres que han tenido parto prematuro, esta es diferente durante un mes aproximadamente y se va adaptando a las necesidades específicas del bebe prematuro, produciendo niveles superiores de vitaminas liposolubles, lactoferrina e IgA, y deficiente en lactosa y Vitamina C, pero con más proteínas, grasas, calorías y cloruro sódico.

Además esta leche contiene grandes cantidades de componentes inmunológicos que le permiten ejercer una función protectora contra virus, bacterias y parásitos, causantes de diarrea aguda y estos componentes se dividen en 2 grupos que se conocen como factores constitutivos (Quelantes, enzimas y factores anti-infecciosos) y factores Inducidos (Células específicas y células inmunocompetentes específicas).

composicion.jpg

 

COMPOSICIÓN DE LA LECHE MATERNA

Agua: La leche está constituida en un 88 % por agua, lo que ayuda a mantener un equilibrio electrolítico en nuestro bebé.

Proteínas: Aunque la concentración de proteínas es baja en la leche (0,9 g/100 ml) es la cantidad que el recién nacido necesita para su óptimo desarrollo.

Oligosacáridos: Se encuentran en grandes cantidades y son los encargados de alimentar a las bacterias buenas del intestino y permite que los demás compuestos se absorban bien en la sangre, lo que redunda en el fortalecimiento del sistema inmune del menor.

Grasas: Este es de los componentes más variables durante el periodo de lactancia, pues presenta cambios tanto en el contenido total de grasa, como en la composición de ácidos grasos, además es el principal aporte de energía para el niño después del nacimiento.

Hidratos de carbono: El principal hidrato de carbono es la lactosa y en la leche materna está presente en unos 7 gramos, lo que ayuda a que el cuerpo del pequeño absorba con facilidad el calcio y el hierro.

Vitaminas: Las vitaminas son las necesarias para nuestro pequeño, sin embargo, estas pueden variar dependiendo de la dieta que lleve la madre, algunas que se pueden encontrar en la leche son las vitaminas A, K, E, D, las liposolubles y las hidrosolubles.

Minerales: La concentración de estos es baja en la leche materna, sin embargo, cumplen con los requerimientos nutricionales que el lactante necesita, estos son el calcio, fósforo, hierro, zinc, cobre, cobalto, selenio, cromo, manganeso, aluminio, plomo, cadmio y yodo.

PRIMERA HORA.jpg

 

IMPORTANCIA DE LA LACTANCIA EN LA PRIMERA HORA DE VIDA

Inmediatamente después del nacimiento el recién nacido debe ser colocado junto a su madre, sobre su abdomen y pecho, piel con piel, porque se ha observado que los bebés ahi se mantienen alertas, pueden reptar (arrastrarse) para alcanzar los pechos de sus madres y empezar a alimentarse.

El contacto de la madre con las manos o boca del bebé estimula la secreción de oxitocina, con lo cual se inicia el flujo de leche materna, el contacto precoz, además el amamantamiento en la primera hora permite que las madres amamanten por tiempo más prolongado.

 

La importancia de este contacto inicial piel con piel y el amamantamiento durante la primera hora, garantiza la temperatura del bebé, lo tranquiliza, le permite una respiración más regular y ofrece la posibilidad de que las bacterias maternas colonicen su piel e intestinos sin causar enfermedades, pues al empezar el amamantamiento la leche de la madre le ofrece elementos protectores frente a estas bacterias.

Los bebés amamantados producen más altos niveles de anticuerpos en respuesta a las inmunizaciones, también ciertas hormonas de la leche materna (cortisol) y proteínas pequeñas (incluyendo factor de crecimiento epidermal, factor de crecimiento nervioso, factor de crecimiento parecido a la insulina y somatomedina C), que actúan sellando las cubiertas de mucosas del recién nacido, haciéndolas impermeables a la acción de patógenos y otros agentes potencialmente dañinos.

La lactancia materna limita la exposición del lactante a agentes patógenos ambientales que pueden introducirse a través de alimentos, líquidos o dispositivos para alimentación contaminados, por esto, promoverla reduce el riesgo de que la diarrea se agrave o se prolongue.

beneficios.png

 

BENEFICIOS DE AMAMANTAR

 

Para el bebé:

• Favorece la liberación de la hormona de crecimiento y un óptimo desarrollo cerebral, fisiológico e inmunológico.

• Protege frente a gran número de enfermedades: diarrea, infecciones respiratorias (catarros, bronquiolitis, bronquitis, neumonía, otitis, etc.). La leche materna tapiza el intestino del bebé protegiéndolo frente a los patógenos.

• Disminuye o retrasa la aparición de problemas de tipo inmunológico: alergias (dermatitis atópica, asma), leucemia, enfermedades crónicas intestinales.

• Previene enfermedades en la edad adulta: diabetes, hipercolesterolemia, coronariopatías, cáncer.

• Se relaciona con la inteligencia cognitiva y emocional. Dar de mamar transmite al bebé seguridad afectiva y esto repercute en su autoestima y en su empatía hacia las necesidades de las demás personas en el futuro.

• Disminuye el riesgo de muerte súbita, de sobrepeso y obesidad, de enfermedad celíaca (intolerancia al gluten), de los efectos nocivos de los contaminantes ambientales, de maltrato infantil.

• La leche materna está siempre preparada y a la temperatura adecuada, presentando en todo momento perfectas condiciones higiénicas.

Estos beneficios son aún más importantes en el caso de bebés que nazcan prematuros o afectados de algún problema (S. de Down, fenilcetonuria, malformaciones, etc.).

 

Para la madre:

• Ayuda a la recuperación tras el parto. El estímulo hormonal hace que el útero se contraiga más rápidamente (entuertos), disminuye la pérdida de sangre en los días posteriores al parto y mejora la posible anemia. Favorece la recuperación del peso y la silueta.

• Reduce las necesidades de insulina en madres diabéticas y normaliza antes el metabolismo de las madres que han tenido diabetes gestacional. · Reduce el riesgo de enfermedad cardiovascular.

• Disminuye el riesgo de cáncer de mama premenopáusico, cáncer de ovario y fracturas de cadera y espinales por osteoporosis en la postmenopausia.

 

Para los dos:

• El amamantamiento desarrolla un estrecho vínculo afectivo materno filial, proporcionando al bebé consuelo, cariño, compañía y seguridad, y ayudando a la madre en su crecimiento personal.

• La elección de la lactancia materna supone un considerable ahorro económico en el presupuesto familiar, no sólo derivado del precio que no se habrá de pagar por la leche artificial y accesorios como biberones, sino también del menor consumo en consultas médicas, ingresos hospitalarios y medicamentos que se ha demostrado en los bebés alimentados con leche materna.

• Contribuye al cuidado del planeta disminuyendo la huella ecológica: no genera residuos y es sostenible.

exito.png

 

LACTANCIA MATERNA EXITOSA

•Es fundamental que sea un acto deseado y gratificante para la madre, el lactante nace con la capacidad de buscar el pecho, reconocerlo y acercarse a él, es muy importante que se coloque al bebé sobre el pecho de su madre inmediatamente al nacimiento (contacto precoz), para favorecer la vinculación y el inicio de la lactancia; al menos la primera hora.

Contacto piel con piel y dejar que el bebé busque por el pecho, pero sin forzarlo, es algo que facilita las contracciones del útero disminuyendo la intensidad de la hemorragia tras el parto y contribuye a establecer en el bebé un buen reflejo de succión. 

Debes saber que la lactancia materna se establece por la puesta en marcha de un sistema automático regulado por hormonas (la expulsión de la placenta, la oxitocina y la prolactina): la succión de tu hijo/a, al estimular el pezón y vaciar el pecho, provocará que tu pecho fabrique más leche: cuanto más te pongas el bebé al pecho, más leche producirás, si no lo pones o le das leche artificial, producirás menos leche.

•El bebé y tú deben permanecer juntos desde el nacimiento el mayor tiempo posible. Se ha observado que la madre duerme mejor y se siente más capaz de cuidar a su bebé cuando lo tiene con ella las 24 horas y también le permite distinguir el llanto y reconocer las demandas.

• A veces, tras mamar nada más al nacer, muchos bebés prefieren dormir el resto del primer día, pero si tu bebé no muestra interés por mamar a partir del segundo día y prefiere dormir, prueba a ofrecerle el pecho con frecuencia: es importante que por lo menos mame 8 veces al día para que tengas una buena subida de leche, mantenlo a tu lado para que el contacto con tu piel estimule su disposición a mamar.

 

• Alimenta el bebé a demanda, cuando lo pida y el tiempo que quiera, es un error imponer horario de las tomas, esto puede ocasionar obstáculos en la lactancia (el bebé pasa hambre, no se sacia, cólico, escaso aumento de peso…),  el bebé, poco a poco y conforme vayan pasando los días, irá adquiriendo un ritmo en las tomas y marcará la cuantía y el intervalo de las mismas.

 

• No es recomendable usar chupete las primeras semanas, hasta que la lactancia se haya establecido adecuadamente, el uso frecuente del chupete está relacionado con la maloclusión dental, problemas de dentición, habla y una mayor predisposición a padecer otitis media durante la infancia, ya que el sistema de drenaje del oído medio se suele afectar con esta práctica.

 

• La utilización de biberón y chupete interfiere el aprendizaje de la succión del pecho materno, ya que al acostumbrarse a la tetina luego le costará más cogerse al pecho, el bebé que se enseña al chupete y/o biberón mama menos, y la falta de estímulo provocará una menor producción de leche en la madre, los bebés alimentados al pecho si por razones médicas necesitaran algún líquido suplementario lo mejor es dárselo en vaso, cucharilla, jeringa o cuentagotas en lugar de utilizar biberón.

 

• La lactancia materna, de nuevo empieza a ser socialmente aceptada y reconocida, dar de mamar no implica prescindir de tus relaciones sociales y familiares, para mantener la lactancia a demanda a la par con tus actividades, más de una vez tendrás que dar pecho fuera del hogar, recuerda que dar pecho en público es un derecho que tienen tú y tu bebé y hay formas de hacerlo discretamente.

cuidados.jpeg

 

CUIDADOS

• La lactancia es un período fisiológico normal y consecuencia natural de dar a luz, no existe necesidad de preparar el pecho, lo que sí es importante es perfeccionar con el bebé la técnica de agarre y aplicar las posturas correctas al dar de mamar.

 

• Los pezones planos o invertidos no contraindican la lactancia, si es recomendable para iniciar la lactancia recibir  asesoría por parte de personal calificado, no se recomienda el uso de pezoneras.

 

• La ducha diaria es una medida higiénica esencial, secar bien las areolas y pezones para evitar que la zona quede húmeda, nunca limpiar los pezones ni antes ni después de las tomas. 

 

• No es recomendable el uso de cremas para el pezón, exprimir y dejar secar la propia leche que tiene sustancias antisépticas y reparadoras es más que suficiente, (los aceites sirven para hidratar, pero cuando han aparecido grietas están contraindicados).

 

• No es imprescindible el uso de sujetador, existen algunos diseñados a propósito para dar de mamar, tampoco es necesario utilizarlo por la noche, prioriza siempre tu comodidad.

V  GBFD.png


AGARRE

• Para que el bebé se agarre bien, frota el pezón contra su labio inferior hasta que abra bien la boca y entonces acércalo al pecho con un movimiento lento, pero firme, siempre debes acercar el bebé al pecho y no el pecho al bebé.

 

• La boca del bebé debe estar muy abierta con los labios evertidos (como una ventosa), el labio inferior abarcando la mayor parte posible de la areola (inferior), ya que la succión correcta se hace con la lengua en la areola, su barbilla pegada al pecho y la nariz rozándolo ligeramente, esta posición le permite respirar sin dificultad, así observarás como llena la boca y traga con movimientos rítmicos, más rápidos y enérgicos al principio de la toma.

 

• No es necesario sujetar la mama, pero si lo haces coloca los dedos y la palma de la mano debajo del pecho y el pulgar en la parte superior (como una letra C), lejos de la areola y sin presionar, nunca hagas la pinza con los dedos porque retrae el pezón y presiona los conductos resultándole al bebé más difícil sacar la leche.

 

• Cuando la succión produce mucho dolor es un signo de agarre incorrecto, para corregirlo tira de su barbilla hacia abajo, aso él abrirá más la boca y colocará bien su labio inferior cogiendo un buen bocado de pecho, esta maniobra es más recomendable que retirarlo del pecho y volverlo a enganchar (produce más dolor), también puedes cambiar de postura.

 

• Si el bebé suelta el pecho espontáneamente, ofrécelo de nuevo y si lo rechaza es señal de que lo ha vaciado, después puedes ofrecerle el otro pecho si lo quiere.

 

• Si por cualquier circunstancia necesitas retirarlo del pecho, introduce un dedo en la comisura de su boca para que se deshaga el vacío y evitar molestias.

 

POSTURA.jpeg

 

POSTURAS

La postura que adoptes dependerá de tus preferencias y de las circunstancias en las que alimentas al bebé, pero lo importante es que estés cómoda y el agarre al pecho sea correcto:

• Biológica o natural: Los especialistas indican esta postura como la más favorable, tanto para el inicio de la lactancia como para continuar en casa, sobre todo en las primeras semanas y hasta que se instaura la lactancia, también te será útil cuando la succión sea dolorosa, esta es una postura instintiva para madre y recién nacido/a, en la que el bebé puede utilizar sus reflejos neonatales primitivos para agarrarse al pecho por sí mismo/a.

Ponte cómodamente recostada boca arriba (en la cama, sofá o sillón) y coloca el bebé sobre tu pecho, en contacto piel con piel (tú con el pecho descubierto y él/ella sólo con el pañal), deja que busque el pezón y se enganche por sí mismo/a, de forma espontánea, guíate del instinto, no lo dirijas, déjale libres manos y brazos, evita empujarlo por la espalda o dirigirle la cabeza hacia el pecho, únicamente rodéalo con tus brazos para que no caiga.

 

• Sentada: Estarás más cómoda sentada en una silla con los pies algo elevados (sobre un taburete) y un cojín bajo el bebé o en una silla muy baja, coge al bebé barriga con barriga, con un bracito por encima y el otro por abajo, pon tu mano en su espalda (no en su colita), de manera que su cabeza repose en tu antebrazo (no en el codo), así quedara frente al pecho, colócalo de forma que su nariz roce tu pezón y cuando abra bien la boca empújalo al pecho, recuerda que el mama exprimiendo la areola con la lengua (no sólo el pezón) por lo que su boca tiene que estar muy abierta con los labios evertidos (vueltos hacia fuera) teniendo un buen bocado de pecho dentro de la boca y cogiendo más areola por abajo que por arriba.

 

• Acostada: Los dos de lado uno frente a otro barriga con barriga, coloca su nariz rozando tu pezón y cuando abra bien la boca engánchalo, esta postura es muy cómoda los primeros días especialmente después de una cesárea (puedes colocar un cojín bajo los pies del bebé para que no golpee la herida) y es la postura más adecuada para las tomas nocturnas, la cabeza del bebé apunta en la dirección del pecho.

• Existen otras posturas, a las que podrás recurrir si fuera preciso, pero estas son las más recomendadas por los medicos y especialistas en maternidad y lactancia.

Cuando empezamos a creer que una ligera dosis de estupidez no es peligrosa, les recuerdo q

 

DURACIÓN DE LAS TOMAS

• La lactancia tiene que ser a demanda, esto significa que deberás darle pecho siempre que el bebé pida y el tiempo que quiera, no se debe seguir un horario estricto, cada bebé tiene un ritmo diferente, la cantidad de leche irá aumentando durante los primeros días hasta llegar a regularse y adaptarse a las necesidades alimentarias del bebé.

 

• Durante los primeros días es aún más aconsejable que el bebé permanezca mamando el tiempo que desee, y es muy común que al poco de ponértelo al pecho se quede dormido, despertándose poco tiempo después para volver a succionar, a veces medio dormido, se recomienda quitarle ropa para mamar porque el exceso de calor le produce sueño, estimúlale con caricias para que siga mamando, no midas tiempo solo dale un pecho hasta que no quiera más y luego ofrécele el otro aunque no siempre lo querrá.

 

• Recuerda que la leche varía su composición a lo largo de la toma, al principio es más aguada y al final más grasa, este es uno de los motivos por lo que es frecuente que durante el primer mes le baste con un solo pecho en cada toma, la conveniencia de dar uno o los dos pechos cada vez es algo que debe individualizarse según la cantidad de leche y las necesidades del bebé, pero lo que sí es importante es que los pechos se vacíen con frecuencia, ya que si quedan restos de leche, además de producirse una desagradable sensación de tensión mamaria, puede disminuir la producción de leche, dado que en la mayoría de los casos el bebé mama de los dos pechos, es recomendable que en cada toma se invierta el orden, es decir comenzar por el pecho por el que se finalizó la vez anterior, ya que de esta forma podremos tener la seguridad de que al menos en tomas alternas ambos pechos se vacían de forma completa.

 

• Es aconsejable facilitarle el eructo tras la toma, para lo cual basta con mantenerlo erguido y apoyado sobre tu hombro dándole un suave masaje sobre la espalda (no es necesario darle golpecitos), si la toma ha sido tranquila, sin tragar aire, es probable que no necesite eructar por lo que tras dos minutos, no insistas más.

problemas.jpeg

PROBLEMAS Y RECOMENDACIONES

 

Pechos congestionados (plétora o ingurgitación): Esto suele suceder durante las siguientes horas a la subida de leche, entre el 3º y 5º día, las mamas se hinchan, se ponen duras y los pezones se aplanan, para prevenir esto pon tu bebé al pecho con mucha frecuencia desde el principio, para que lo vacíe bien.

 

Si sientes molestias, te ayudará si antes de la toma te aplicas calor húmedo (paños con agua caliente, ducha de agua caliente), masajes manuales, descarga o vaciamiento manual para ablandar el pecho antes de la succión y disminuir la tensión mamaria.

Aplicar frío seco durante media hora, luego de la toma te ayudará a calmar el dolor (para hacerlo tomas una bolsa con hielo envuelta en un paño y colocalas en tus senos), si a pesar de todo persiste el dolor, pregunta a tu médico si puedes tomar un analgésico como ibuprofeno o paracetamol.

Pezones dolorosos y grietas: Las grietas son fisuras que pueden aparecer en el pezón o areola, aunque son dolorosas su aparición no debe suponer un motivo de abandono de la lactancia, estas se previenen y curan con una correcta técnica de postura y agarre, pero además si o si debes mantener seco el pezón entre tomas, para lograrlo, tras la toma, puedes exprimir unas gotas de leche y dejarla secar sobre el pezón y la areola (la leche tiene propiedades antisépticas).

 

También puedes usar escudos aireadores o tomar un analgésico (ibuprofeno, paracetamol o aspirina) y si son muy dolorosas o no se curan, consultar con tu pediatría, porque podría tratarse de una infección bacteriana que necesite tratamiento.

Obstrucción de conducto: Se pone caliente y doloroso en uno de los pechos, suele estar causado por un sujetador apretado, por dormir con sujetador o por saltarse tomas.

 

Se soluciona con masajes para extraer el tapón, además puedes peinar la zona con un peine (peineta), de dientes estrechos, aplicar calor húmedo antes de la toma y frío seco después, también aplicando posturas para amamantar en las que la barbilla del bebé esté próxima al bulto (esto facilita el vaciado de esa zona).

Mastitis: Es una infección de la mama, causada por un manejo inadecuado de grietas en el pezón o de una obstrucción de los conductos, se manifiesta principalmente con dolor profundo en pecho y/o pezones (el dolor puede ser punzante, ardiente, con picores, en uno o en los dos pechos), también se puede manifestar con fiebre, sudoración nocturna, malestar general, dolor de cabeza, náuseas, vómitos, enrojecimiento o bulto en un cuadrante del pecho y tambien el bebé suele estar inquieto en las tomas.

Cuando aparece debes consultar tu pediatría para te mande una muestra de leche para análisis microbiológico e iniciar tratamiento con antibióticos si fuera preciso, puedes tomar analgésicos (ibuprofeno, paracetamol o aspirina) para el dolor.

Es aconsejable el lavado frecuente de las manos, sujetadores y discos, evitar la humedad en el pecho (usa escudos aireadores para los pezones) y hervir los objetos que están en contacto con la boca del bebé, descansa y continúa amamantando y/o extrayendo la leche.

 

Escasez de leche: Durante la lactancia puede haber períodos transitorios en que se produzca menos leche de la que necesita el bebé, lo notaras porque el bebé se coge al pecho con ganas, pero pronto se inquieta y llora al no recibir la cantidad de alimento que necesita, además de permanecer entre las tomas un poco irritable.

 

Esta situación se resuelve ofreciéndole el pecho más a menudo (lactancia intensiva durante un día o dos), ya que la succión estimula la producción de leche, si hay poca leche el bebé mama más y aumenta la producción, y si hay demasiada leche, el bebé mama menos y la disminuye, descansa y relájate, toma más líquidos y no recurras a la leche artificial para solucionar este problema, pues el bebé mamará menos y se acabará interrumpiendo la lactancia.

Antes de cambiar a leche artificial si aun no produces suficiente leche es recomendable que vayas al pediatra para que evalúe la situación y te oriente.

leche-materna-donacion.jpg

 

EXTRACCIÓN DE LECHE MATERNA

 

La extracción de leche puede resultar útil en diversas circunstancias (subida de leche, separación temporal del bebé, inicio de la actividad laboral), pero si vas a extraer la leche de forma manual como con sacaleches debes primero preparar el pecho para facilitar la extracción, lo normal es que las primeras veces salga poca cantidad, necesitarás practicar para obtener una buena cantidad de leche y es más eficaz sacarse en varias sesiones breves que en sesiones largas.

El momento más adecuado para la extracción es:

• Si solo el bebé mama de un pecho, extraer del otro (puedes hacerlo al mismo tiempo)

• Si no vacía el segundo pecho, vaciarlo por completo

• Entre toma y toma

• Cuando el bebé se salta una toma

• Después de la primera toma de la mañana, cuando los pechos están más llenos

 

Nota: Siempre lávate siempre las manos antes de manipular el pecho.

 

Estimulación del pecho

1. Masajea el pecho oprimiéndolo firmemente hacia la caja torácica (costillas), usando un movimiento circular con los dedos en un mismo punto, sin deslizar los dedos sobre la piel, después de unos segundos cambia hacia otra zona del pecho.

2.Frota el pecho cuidadosamente desde la parte superior hacia el pezón, de modo que produzca un cosquilleo, continúa este movimiento desde la periferia del pecho hacia el pezón, por todo alrededor.

3.Sacude ambos pechos suavemente inclinándote hacia delante.

Extracción manual (Técnica de Marmet)

Es cómoda, barata y sencilla, lávate las manos y estimula el pecho previamente e inclínate hacia delante con el pecho en posición de péndulo.

1.Coloca el dedo pulgar y los dedos índice y medio formando una letra C, a unos 3 o 4 cm del pezón (no siempre coincide con el borde de la areola), evita que el pecho descanse sobre la mano.

2.Empuja los dedos hacia atrás (hacia las costillas), sin separarlos, si tienes los pechos grandes o caídos, primero levántalos y después empuja los dedos hacia atrás.

3. Comprime hacia el pezón, con movimiento como de rodillo, sin deslizar los dedos, es una acción de ordeño (si imaginas que hay como una bolsa detrás del pezón, en el primer movimiento la sujetas y en el segundo la vacías).

4.Repite rítmicamente para vaciar, rota la posición de los dedos para vaciar todos los cuadrantes del pecho, utiliza ambas manos en cada pecho.

5.Evita maniobras como exprimir, deslizar y estirar, la extracción no debe causar dolor.

6.Alterna estimulación y extracción en ambos pechos.

shutterstock_296114498-min-transformed.jpeg

 

Extracción con sacaleches

El procedimiento que debes seguir es el mismo que para la extracción manual, es decir, comienza con lavado de manos, estimula la bajada de leche y aplica el sacaleches siguiendo las instrucciones del fabricante, existen dos tipos de extractores, los mecánicos (manuales) y los eléctricos, el modelo mecánico más adecuado es el de tipo palanca, pero si vas a tener que extraerte leche de forma habitual durante un tiempo, te resultará más cómodo utilizar uno eléctrico.

 

Tiempo de extracción (a modo orientativo)

 

El procedimiento completo (estimulación y extracción) dura aproximadamente 30 minutos.

1. Extrae la leche de cada pecho de 5 a 7 minutos

2. Masajea, frota y sacude

3. Extrae nuevamente de cada pecho de 3 a 5 minutos

4. Masajea, frota y sacude

5. Extrae una vez más de 2 a 3 minutos

 

Conservación de la leche

 

• Temperatura ambiente (hasta 25ºC): 6-8 horas

• Refrigerador (nevera): hasta 4 días

• Congelador de nevera: 2 semanas

• Congelador normal: 3 meses

• Congelador industrial (- 18ºC) : 6 meses

 

Almacenamiento

Recipientes 

Por su parte, los recipientes para almacenar la leche materna pueden ser de plástico o de cristal. La ventaja que tienen es que suelen contar con tetinas para no tener que mover la leche de sitio cuando llegue la hora de ofrecérsela a nuestro bebé. Además, el cristal conserva mejor cualquier alimento al ser menos poroso que el plástico.

Su desventaja es que ocupan más espacio que las bolsas y, además, esto se agrava si no llenamos el recipiente porque necesitamos menos cantidad de leche.

Bolsas 

Ocupan mucho menos espacio en el congelador, son de un solo uso y no hay que lavarlas o esterilizarlas, tienen un cierre firme que evita derrames y puede escribirse sobre ellas para fijar la fecha de extracción, normalmente, cada extractor de leche tiene su propia marca de bolsas, pero como son flexibles, podemos adaptar cualquier bolsa a la boquilla del aparato, siempre debemos elegir el tipo que mejor se adapte a nuestras necesidades. 

Puedes mezclar la leche extraída durante el día en el mismo envase, consérvala en el frigorífico, es posible que la leche tenga aspecto de cortada, siempre agita el recipiente antes de usarla, para congelar la leche, enfríala antes en nevera y guarda en pequeñas cantidades (60 –120 cc) para así descongelar lo que el bebé vaya a tomar, finalmente siempre etiqueta los envases con la fecha de extracción para usar siempre la leche más antigua.

 

Leche congelada

 

• Se recomienda, siempre que sea posible, descongelar despacio en la nevera, una vez descongelada se puede conservar en la nevera 24 horas, si no se utiliza hay que desecharla.

• Calentar la leche en un recipiente con agua caliente (nunca a fuego directo), hasta que esté tibia (36ºC), si la calientas y no la usas, botala, la leche no se debe hervir ni calentarse en microondas. 

• Si necesitas la leche urgentemente, puedes descongelarla introduciendo el envase de la leche en un recipiente con agua fría, luego tibia y por último caliente hasta alcanzar la temperatura adecuada.

• Agitar bien la leche antes de comprobar la temperatura.

• Si se descongela en nevera la puedes mantener a temperatura ambiente 4 horas y en la nevera hasta 24 horas, pero ya no se puede volver a congelar.

• Tira la leche que sobra de la toma.

• Si fuera necesario, puedes mezclar leche materna fresca, congelada y leche artificial.

• Es preferible dar la leche extraída con una cuchara, jeringa o vasito en vez de biberón.

• Siempre que puedas, evita el biberón para no confundir al bebé con la técnica de succión.

 

DIETA.jpeg

 

DIETA, MEDICAMENTOS Y OTRAS SUSTANCIAS

• No hay ninguna razón médica para que mientras das el pecho tu dieta sea diferente de la habitual, recuerda que una dieta equilibrada y sana es la mejor, una que contenga a diario hidratos de carbono como arroz, pasta, patatas, así como verduras, legumbres, frutas, pescado o carne, grasas y abundantes líquidos. 

• Si tienes sed bebe más líquidos, preferiblemente agua, la leche de vaca (y de otros tipos) es un buen alimento, pero no es imprescindible que tomes, muchas veces estas son la causa de molestias digestivas y alergias alimentarias en la madre y/o en el bebé.

 

No es necesario retirar ningún alimento de la dieta, casi todos los alimentos pueden modificar el sabor de la leche, sobre todo los que contienen sustancias volátiles como ajo, cebolla, apio, col, etc., esto, en principio, no es malo para tu bebé porque así se acostumbra a probar nuevos sabores y facilitará la introducción de los alimentos sólidos, si observas que cuando comes algún alimento concreto tu hijo/a rechaza el pecho o tiene más cólicos de lo normal, intenta evitarlo durante un tiempo.

 

• Informa siempre a tu médico/a que estás dando el pecho a tu bebé, para que si te receta medicamentos elija el que resulte más inocuo, aunque la mayor parte de los medicamentos pueden pasar a la leche, es un error recomendar sistemáticamente el destete sin haber buscado información fiable, es preciso consultar con fuentes de prestigio avaladas científicamente como es (www.e-lactancia.org).

 

• El alcohol tomado con moderación y ocasionalmente como aperitivo, vino o cerveza en la comida tiene escaso efecto sobre el bebé, ya que se elimina en pequeña cantidad a través de la leche, luego de consumir algo con alcohol puedes dar de mamar pasadas dos o tres horas, sin embargo, un consumo excesivo, además de dificultar la salida de la leche, es perjudicial para la de tu bebé.

 

• El café tomado con moderación carece de efectos sobre el bebé, no obstante, si observas que está más nervioso o duerme menos de lo normal, reduce tu consumo diario e igual con otros estimulantes como té, mate, chocolates, refrescos de cola, etc.

 

• El tabaco es perjudicial para la de tu bebé y el mayor peligro del tabaco es el humo, por lo que es necesario evitar la exposición del bebé (y niños/as de cualquier edad) al humo del tabaco, está probado que los hijos de madres y padres fumadores padecen más problemas respiratorios (catarros, otitis, sinusitis, bronquiolitis, asma…) por la exposición al humo, además si expones al humo del tabaco tu bebé y le das leche artificial, le estarás perjudicando enormemente su salud general.

 

• Drogas como la heroína, cocaína, marihuana o hachís, pasan fácilmente a la leche con lo cual el lactante sufrirá sus efectos, así como los del síndrome de abstinencia.

Media
PREGUNTAS.png

 

DUDAS O PREGUNTAS 

 

¿Cómo puedo saber si tiene suficiente con mi leche?

Al no poder ver qué cantidad de leche toman los bebés amamantados, muchas mujeres temen que no estén comiendo suficiente, sobre todo cuando el bebé llora, pero para tu tranquilidad te contamos que la inmensa mayoría de las ocasiones que los bebés lloran no es porque no tengamos leche para alimentarlos.

Además si tu bebé está contento normalmente, pide teta con frecuencia, hace pipí y cacas líquido amarillentas varias veces al día y va aumentando de peso (aunque la primera semana es normal que pierdan peso) es que todo va bien.

No es aconsejable pesarlo todos los días, puesto que los bebés crecen a estirones y puede haber semanas que no engorden nada.

Si fuera necesario aumentar la producción de leche puedes hacer lactancia intensiva durante 1-2 días (ofrecer el pecho más a menudo de lo que pide), para saber más a tu pediatra.

¿Las mujeres con los pechos pequeños tienen menos leche?

No eso es absolutamente falso, la cantidad de glándula mamaria es igual en todas las mujeres independientemente del tamaño del pecho, cualquier mujer puede amamantar, todo es cuestión de proponérselo, durante la lactancia, tanto el cuerpo del bebé como el de la madre están preparados para regularse mutuamente de forma natural, siempre el pecho de la madre produce más leche cuanto más se da de mamar.

¿Tengo la leche aguada?

La leche que gotea al principio de la toma sí es aguada y así debe ser así, puesto que su función es calmar la sed del bebé, pero la concentración en grasas va aumentando y al final es alrededor de cinco veces mayor (aumento que es el que lo llena (provoca saciedad), por eso siempre debemos asegurarnos que vacía un pecho antes de ofrecer el otro, por eso es importante que no cuentes el tiempo, ya que la leche que más le alimenta está al final de la toma, tu leche no solamente es buena, sino insuperablemente mejor que cualquier producto artificial.

¿He de esperar hasta que sea la hora de amamantarlo aunque llore?

No. La lactancia tiene que ser a demanda, cuando quiera y el tiempo que quiera, esto para lograr una regulación natural de la lactancia, nunca crees horarios. sé flexible, recuerda que cada bebé tiene un ritmo diferente, sobre todo durante los primeros días.

¿Debo despertarlo/a si duerme demasiado?

No siempre es necesario, si es un bebé sano y crece bien, las primeras semanas conviene que haga entre 8 y 12 tomas diarias, en el caso de un recién nacido/a que haga menos de 8 tomas diarias y que no engorde lo necesario o pierda peso es aconsejable estimularlo y despertarlo para evitar que pierda más peso.

¿Tengo que darle el pecho por la noche?

Si, siguiendo la demanda de tu bebé, casi todos los bebés necesitan seguir mamando por la noche, es normal, si le das de mamar acostada en la cama facilitas tu descanso.

¿Cuánto tiempo es bueno amamantar?

Todo el que tú desees, la Organización Mundial de la Salud recomienda que los bebés sean alimentados exclusivamente con la leche materna los 6 primeros meses, y a partir de los 6 meses complementar la lactancia materna, de forma lenta y progresiva con otros alimentos hasta los 2 años o más, no hay tiempo límite para la lactancia materna, el que pongáis tú y tu bebé, pero lo que sí es cierto es que entre más dure será mejor para tu hijo.

¿Cómo puedo combinar la lactancia con el trabajo?

Si trabajas por la mañana, dale el pecho al levantarte y otra vez justo antes de separarte de él/ella, durante las horas que permanezcas ausente, pueden alimentar a tu bebé con tu leche extraída previamente y al volver a darle el pecho durante el resto de las tomas.

A partir de los seis meses tu bebé puede tomar las papillas mientras tú estás fuera y el pecho cuando estás en casa, puedes darle arroz hervido con agua o caldo, plátano triturado o patata hervida, son buenos alimentos para empezar y se puede añadir un chorrito de aceite de oliva, pero nada sal ni azúcar y cuando regreses a casa otra vez pecho, es conveniente que haga, al menos, de 5 a 7 tomas de pecho al día para asegurar que toma toda la leche que necesita, los días que no trabajes puedes darle solo pecho, sin papillas; así tendrás más leche.

Algunos médicos aconsejan adelantar las papillas, en vez de usar leche artificial (que es uno de los alimentos que más alergias puede causar durante la lactancia mixta, por este mismo motivo, no se recomienda preparar los cereales con leche artificial, más bien prepararlos con leche materna extraída, agua o caldo.

¿Cómo debo destetarlo/a?

Es aconsejable esperar a que sea el bebé quien se destete de forma natural y espontánea, si decides destetarlo tú (no recomendado), es mejor hacerlo gradualmente para evitar traumatismos, se comienza reemplazando una de las tomas por el nuevo alimento y así progresivamente hasta que el bebé es destetado del todo, si sientes tensión molesta en el pecho, extrae un poco de leche para aliviar, previniendo la posibilidad de la acumulación, obstrucción de conducto o mastitis, si deseas volver a amamantar después de iniciar el destete (relactación), no hay ningún impedimento.

Estoy de nuevo embarazada ¿puedo seguir dando pecho?

Por supuesto que no hay inconveniente en amamantar durante el embarazo y alternar la lactancia del bebé y del hermano/a mayor (lactancia en tándem).

Voy a adoptar un bebé ¿podré amamantarlo/a?

Puedes estimularte el pecho con sacaleches con antelación, con información y ánimo se puede conseguir una producción de leche aceptable, suplementar o al menos satisfacer la succión de consuelo para facilitar la creación del vínculo.

 

He tenido un parto múltiple, ¿puedo amamantarlos/as?

La clave del éxito es la misma que con un solo bebé, el inicio inmediato después del parto, alojamiento conjunto, lactancia a demanda frecuente, no hagas caso de los comentarios negativos del entorno.

 

He tenido un bebé prematuro, ¿puedo amamantarlo/a?

Si, en estos casos la leche materna es casi un tratamiento porque se adapta a las necesidades especiales del prematuro/a y favorece que su desarrollo esté libre de complicaciones, dependiendo de su edad podrá mamar o tendrán que administrarle tu leche extraída (o leche donad), pueden aplicar método madre canguro si su situación clínica lo permite que se trata del contacto piel con piel del bebé con la madre (u otro familiar), lo más pronto, continuo y prolongado posible en la unidad neonatal.

© 2023 by bebesporsiempre.com

bottom of page